(Fuente: El Correo, EiTB, Ecologistas en Acción; imagen: Tigerdirect)
El pasado jueves 23, leíamos con estupor cómo el PP de Getxo pide al Ayuntamiento que instale puntos de acceso WiFi por la ciudad, tras 272 peticiones vecinales. Cuando nos reunimos con todos los partidos políticos de Getxo, antes de las elecciones municipales, alertamos no sólo del riesgo que suponen las estaciones base de telefonía móvil cercanas a los domicilios, sino también los puntos de acceso WiFi.
No es por ir en contra de la tecnología. Insistimos en que pueden ser grandes avances, pero instalar porque sí dichos puntos, no nos parece nada oportuno. ¿Han estudiado la posibilidad de instalar puntos de información con acceso a Internet por cable? ¿Son imposibles las conexiones por cable -mucho más rápidas- en las aulas de cultura, bibliotecas y polideportivos municipales, donde pretenden que el acceso sea gratuito?.
No nos inventamos nada: el Parlamento Europeo ha pedido "a los Estados miembros que, mediante medidas fiscales u otros incentivos económicos, animen a los actores del mercado a mejorar la calidad del aire interior y reducir la exposición a la radiación electromagnética en sus edificios, sucursales y oficinas". Y en estas reducciones de campos electromagnéticos (CEM), también entran los puntos de acceso WiFi.
Ejemplos no faltan. El Informe del Observatorio Europeo de Riesgos de la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo califica a los CEM como uno de los riesgos emergentes más peligrosos en el ámbito laboral europeo. La Universidad de Lakehead, en Ontario, Canadá, ha eliminado las conexiones WiFi. El 20 de julio de 2007, el Ministerio Federal Alemán de Medio Ambiente, señalaba que como medida de precaución son preferibles los sistemas de transmisión de datos por cable como alternativas a los sistemas WiFi. Se recomendaba a escuelas y centros de enseñanza que, si era posible, se evitase los sistemas WiFi. En septiembre del año pasado, la Agencia Europea de Medio Ambiente (EEA) alertaba sobre las radiaciones de los sistemas WiFi. En noviembre de 2007, El Comité de Higiene y Seguridad (CHS) de la Dirección de Asuntos Culturales de la ciudad de París ha votado la propuesta que reclama una moratoria para la implantación del WiFi en bibliotecas y museos hasta hasta poder constatar si existen efectos genotóxicos de las frecuencias del WiFi sobre la salud. La propia Biblioteca Nacional de Francia renunciaba en abril de 2008 al WiFi , para dar acceso a Internet. En diciembre del año pasado, la Alcaldía de Paris desactivaba las instalaciones wifi de seis bibliotecas públicas de la ciudad, debido a que los trabajadores se quejaban de problemas de salud, invocando el principio de precaución . En Italia, Suiza, Austria y Rusia, se han producido determinaciones similares. En el Reino Unido, también se ha generado una gran alarma, tras la emisón del programa Panorama de cómo el WiFi podría afectar a la salud, principalmente en los centros educativos.
Por si fuera poco, dos días antes de la noticia de Getxo, saltaban las alarmas en la Universidad de Baiona, por los posíbles transtornos que estaban causando varios puntos de acceso WiFi sobre los empleados del centro: una vez se retiraron dichas conexiones inalámbricas los síntomas, como los dolores de cabeza, desaparecieron.
Por tanto, políticos de nuestro municipio: antes de lanzar propuestas de cara al electorado, por favor cerciórense de que van a ser en beneficio de todos los ciudadanos, principalmente de los niños.
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2 comentarios:
El acceso por cable (fibra óptica) no solamente es mucho mas rápido, sino mas fiable y de mejor calidad que una onda que puede ser interrumpida.
Me parece muy bien todo esto, pero mientras tanto sigamos usando los moviles, que esos no hacen nada.
Eso sí es que el móvil lo necesito...en fin!!!
La FFOO no se puede desplegar por cualquier sitio y es infinitas veces más cara.Cuando pongan más zonas de OTA para poder pagar la FFOO, tal vez se prefiera poner WiFi, no?
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