¿En qué quedamos?

(Fuente: El Correo Digital)

La incertidumbre científica entorno a cómo pueden afectar los móviles a la salud sigue dando que hablar. Y mientras se aclaran, unos pedimos medidas preventivas y otros (las operadoras) siguen pidiendo tiempo para seguir investigando, sin establecer ningún mecanismo de precaución,

Un ejemplo del impacto mediático. Hace casi dos años, se publicaba que "uno de los estudios más exhaustivos y prolongados de los realizados hasta la fecha vuelve a alejar la sospecha: no importa si se habla mucho o poco tiempo, el uso del teléfono móvil no aumenta las posibilidades de sufrir un cáncer". Sin embargo, el mismo medio de comunicación, parece que le llegan nuevos vientos y publicaba la semana pasada que "el mayor estudio hasta el momento vincula el uso del móvil al desarrollo de tumores".

¿En qué quedamos?. Desde luego, el Consejero Delegado de una operadora ya aseguraba hace años que la telefonía móvil es una causa más de muerte, incuso para quien no la utiliza. Críticas no le han faltado al primer estudio. Al segundo, por el momento, nadie se ha atrevido a hacerlo, aunque imaginamos que las operadoras tratarán de minimizar su impacto.

Desgraciadamente, el primer estudio fue publicado en la versión impresa del periódico con gran alarde tipográfico, mientras que el segundo sólo pudimos encontrarlo en la versión digital del mismo periódico.