(Fuente imagen: fernan.com.es)
Tras el apagón de ayer, pude leer la noticia aparecida en el diario 20 minutos, que Santutxu había recogido 2.100 firmas para denunciar la excesiva concentración de antenas en su barrio, pidiendo al Ayuntamiento que regulen de una vez este tipo de instalaciones y que se respeten unas distancias mínimas. La foto del artículo es un pequeño ejemplo: en la calle Santutxu 28 y 30 podemos encontrar dos estaciones base a escasos metros una de la otra y en medio de una zona residencial, en donde niños, ancianos y adultos reciben de forma crónica unas radiaciones que nadie ha podido demostrar su inocuidad.
Para ello la agrupación vecinal "Santutxu sin antenas" entregó al Ayuntamiento un documento para que se regularice esta situación que puede llegar a resultar insostenible.
Por otra parte, Bruselas acaba de recibir una carta de ciudadanos belgas, solicitando que rebajen los límites de exposición a las emisiones de campos electromagnéticos. Como véis, en todos los sitios parece que hay gente que se queja de la actitud de las operadoras y el excesivo campo de maniobra que les ofrecen los políticos. A ver cuánto puede aguantar esta farsa el lobby de las operadoras y la industria de la telefonía...
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