(Fuente imagen: childlocate)
El Eurobarómetro de mayo de 2006 indicaba que el 70% de los adolescentes europeos de 12-13 años y el 23% de los niños europeos de 8-9 años disponen ya de teléfono móvil. Viviane Reding, Comisaria Europea para la Sociedad de la Información ya ha advertido de la necesidad de proteger a los niños de la telefonía móvil. Pero no sólo porque ataca a su privacidad, sino porque afecta a su salud: para muestra una foto en la que se ve cómo afectan las radiaciones a los cerebros de los niños, cuyo cráneo se está aún formando.
El Comité Científico Europeo Comité de los riesgos sanitarios emergentes y recientemente identificados (SCENIHR), en el documento de julio de 2006 acerca de los posibles efectos de los campos electromagnéticos sobre la salud humana, asume que alrededor de un 1% de los niños europeos se verá afectado por la leucemia, que puede derivarse de la exposición a estas radiaciones. Dicen que sólo un 1% de la población infantil está expuesta a los niveles de radiación peligrosos. Ya hemos visto que son muchos más, dado que un teléfono móvil en el oído supera los niveles de 0,4 microteslas...
Recomiendo una lectura de las reflexiones del Dr. C. Gómez-Perretta acerca de este asunto.
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